viernes, 19 de agosto de 2011

Educación para todos



Si de logros se habla siempre se destaca lo económico por ser lo que más repercusión en lo inmediato tiene y porque el modelo económico es el que permite implementar otras políticas. Sin embargo podemos decir que en el área de Educación es donde más cambios ha habido en los últimos años. No sólo el presupuesto educativo se ha elevado hasta alcanzar un 6,5 % del PBI, por encima de los índices internacionales exigibles, sino que además se ha logrado construir el sistema educativo más inclusivo de nuestra historia.

En tiempos en los que en otros países los jóvenes salen a las calles reclamando el respeto de este derecho humano fundamental como pasa en Chile, en nuestro país todos los niños y jóvenes acceden a la educación gratuita y el Estado les garantiza todo los elementos necesarios para permanecer y alcanzar una educación de calidad.

Son las netbooks que permiten una computadora por alumno, pero no sólo eso. Las bibliotecas de las escuelas públicas están llenas de libros y esto no es un tema menor si recordamos que hace unos años atrás sólo se encontraban un puñado de libros semidestruídos y anacrónicos. Hoy los docentes y alumnos tienen a su disposición manuales de todas las áreas de diversas editoriales, libros de literatura, de ciencias y artes en una proporción de un libro un alumno. Porque el modelo 1 a 1 ya no es el de la fría economía que tanto daño nos causó sino el de la inclusión educativa que permite que cada joven y cada docente tengan libros, computadoras y espacios para construir conocimiento que es construir futuro.

Docentes con los sueldos más altos de la historia, que se sientan en paritarias a discutir su salario y sus condiciones de trabajo, que ahora se pueden capacitar porque el Estado les otorga la posibilidad de hacerlo y con calidad.

Escuelas abiertas a actividades extracurriculares, jornadas de participación y ejercicio de ciudadanía, proyectos que otorgan a nuestros jóvenes la posibilidad de expresarse, crear y ser parte del tiempo que les toca vivir. Esto solo es posible cuando desde el Estado se tiene la convicción profunda de que el futuro es hoy y los jóvenes son los protagonistas de las transformaciones sociales.

Desde el año 2003 en la Argentina la Educación es un derecho humano que el Estado garantiza para todos. Porque también los adultos de hoy que fueron excluidos de la educación por las políticas neoliberales tienen la posibilidad de iniciar o completar sus estudios mediante becas, apertura de más establecimientos y programas especiales para finalizar los estudios.

Tenemos el orgullo de estar construyendo un modelo de país donde la economía está al servicio de la política y no al revés y donde la educación es un derecho para todos. Pero además no es algo que se dice sino que es la realidad efectiva que debemos defender.


Silvina Rosignoli